Ya sea a la hora de construir una vivienda de cero, o bien si vamos a rehabilitar una fachada, estos son los trucos que te ayudarán a proceder a la colocación de piedra natural.
Pero antes deja que te cuente un poco más.
El auge en el uso del revestimiento de piedra como recurso de diseño, es una de las incorporaciones más con más fuerza en el panorama de la arquitectura actual.
Obviamente que la piedra como revestimiento, no es un material nuevo, pero recién en los últimos años la hemos visto aparecer de forma mas frecuente en publicaciones gráficas, imágenes de Internet, programas de diseño, y sobre todo en la arquitectura cotidiana.
A partir de esa incorporación la gente empieza a pensar:
- ¿y por qué no en mi casa…?
- ¿Dónde usar el revestimiento de piedras naturales para que realmente luzcan bien?
- ¿Cómo hacer “paredes de piedra” (que no lo sean tanto)?
- ¿Cuáles son las ventajas y desventajas del revestimiento de piedra decorativas, para hacer una buena elección y un mejor uso?
Colocación de piedra natural en revestimientos
Revestimiento de piedra: Razones para elegirlas
Antes, las piedras para revestimiento estaban reservadas a un uso muy restringido, sobre todo en aquellos lugares que visitábamos sólo en vacaciones.
Hoy, a fuerza de empuje mediático (en todos lados podemos verlas), el uso de piedras decorativas se ha terminado incorporando como un recurso estético cada vez mas masivo; una especie de “efecto contagio” del cual nadie quiere estar excluido.
Pero de a poco y a fuerza de una demanda cada vez más fuerte, en los últimos tiempos, la posibilidad de acceder a distintos tipos de piedras se ha ido modificando.
En la actualidad es cada vez mas frecuente encontrarse con corralones proveedores de una amplia gama de revestimiento de piedras naturales, que no sólo le han dado variedad a la elección sino que, fundamentalmente han permitido abaratar costos.
La ecuación es más que sencilla; revestimiento o enchapado de piedras naturales como recurso de diseño, se ven cada vez más a menudo
La gente se tienta y las pide; alguien ve allí el negocio redondo, y así empieza a moverse la “maquina del consumo” que las pone a nuestro alcance.
Revestimiento Símil Piedra
En general mucha gente suele confundir a la piedra natural con el revestimiento símil piedra.
Como podrás imaginarte un revestimiento de fachadas imitación piedra, obviamente no utiliza piedras naturales.
Si bien todo es una cuestión de gustos (aquí se terminan las ciencias), prefiero usar piedras para revestir paredes que se parezcan a verdaderos muros de piedra, y para eso no hay como la materia prima original.
Si por el contrario lo que estás buscando es tener un revestimiento exterior con terminación rústica (símil piedra), podrás recurrir a cualquiera de estas tres opciones:
Material de frente:
Hecho en base a una mezcla de cementos, pigmentos de color, arenas, mica y piedras graníticas pequeñas de distinta granulometría.
Ha sido históricamente un recurso muy usado para revestimientos exteriores de fachadas.
Revoque Plástico o Revestimiento Plástico
Para los amantes de lo técnico digamos que es una mezcla de polímeros acrílicos elastométricos, cargas minerales y pigmentos, lo que en definitiva no aporta casi nada para comprender de qué se trata.
Para no marearte, digamos sólo que es el revestimiento rústico más usado del momento que cuenta con innumerables ventajas para su utilización dentro de los revestimientos exteriores.
Revoque Salpicado de Cemento
Hecho en base a una mezcla de cemento y arena, se aplica con un molinete manual, salpicándolo sobre un revoque grueso de superficie lisa.
Para una terminación menos rústica (y más amable al tacto), se lo suele alisar parcialmente con un fratacho (frataz), llana metálica, o simplemente una botella, dejando la superficie con una terminación de imitación piedra muy agradable.
Con un acabado de látex de color se logra un resultado más que aceptable.
Características y tipos de revestimiento de piedra
Piedras decorativas o paredes de piedra
Las piedras naturales tienen dos usos bien diferenciados de acuerdo a la región donde se las utiliza.
En zonas próximas a áreas montañosas la piedra es usada como sistema constructivo (muros de piedras), así como en otras zonas recurrimos al ladrillo.
Esto se entiende a la luz de la disponibilidad de materia prima abundante y económica.
En regiones más alejadas de los centros productores de esta materia prima, se termina utilizando el enchapado de piedra(revestimiento de piedra), apelando así a un uso más decorativo.
Por una cuestión de sentido común, la comercialización en cortes de menor espesor ha contribuido a abaratar los costos de fletes al reducir enormemente los pesos a transportar.
Este simple hecho ha sido una de las claves que permitieron que los muros de piedra (o su imagen como tal) fueran apareciendo en lugares donde antes hubiera sido impensado verlas.
De esa forma se ha generalizado el revestimiento de piedra para paredes, que por los resultados vistos, no difiere demasiado en apariencia con los muros construidos enteramente en ese material.
La piedra como revestimiento
No hay restricciones que en principio puedan limitar su uso. Hoy por hoy el revestimiento de piedra exterior es tan habitual como los muros decorativos para interiores.
Y si de superficies hablamos, lo usual es colocarlas sobre revoques gruesos.
Esto no es excluyente, ya que muchos suelen aplicarlas directamente sobre el ladrillo sin revoque.
Desde mi punto de vista, si estamos pensando en un revestimiento de piedra exterior, esta forma puede dar lugar a filtraciones por las juntas abiertas, que luego generaran humedad en las paredes.
Si sobre la pared virgen tomamos la precaución de hacer una capa exterior impermeable (revoque hidrófugo), tenemos la posibilidad de proteger los muros de la agresión propia de los agentes climáticos.
Hay que tener en cuenta que un muro con revestimiento de piedra decorativa NO NECESARIAMENTE ES IMPERMEABLE, y si no queremos arrastrar con un problema que luego resulte casi imposible de solucionar, es mejor evitarlo desde el inicio.
Tipos de piedra
Las variedades de piedras decorativas ofrecidas en el mercado son infinitas, tanto en tipos, colores y texturas, como en medidas y espesores.
Hay piedras naturales en planchas grandes (piedras laja, etc.) o pequeñas, de formas regulares o, por el contrario, piedras rústicas e irregulares que generan imágenes totalmente distintas, lo que te permite muchas opciones según sea la intención que busques en el diseño.
Colocar un revestimiento de piedra
¿Cómo revestir una pared? Depende en gran medida del tipo de piedra que vayamos a utilizar, de su peso, de su tamaño y su forma.
Si hablamos de piedras naturales de espesores generosos y con pesos importantes, es muy común que se las coloque de la misma forma que colocamos los ladrillos, ya que en este caso se parecerán más a un muro que a un revestimiento de piedra.
A tal efecto podrán utilizarse las mezclas de cemento que habitualmente se emplean al levantar paredes.
Si las piedras son delgadas o se colocarán de forma plana sobre el muro, lo más aconsejable es colocarlas con los mismos pegamentos formulados para la colocación de cerámicos.
Es muy común que para el caso de un revestimiento de piedras rústicas se “pierda” muy fácilmente la línea horizontal de colocación, con un resultado final que arruina el conjunto.
Otras razones para saber cómo elegir un revestimiento de piedras decorativas
Mas allá de no ser un material económico y de cierta arbitrariedad propia de las modas, hay que reconocer que las piedras decorativas para pared han sabido ganarse un lugar en la preferencia de la gente.
A riesgo de incursionar en áreas que no son de mi dominio, me animaría a tratar de encontrar alguna otras razones que justifican la elección del revestimiento de piedras naturales:
Piedras rústicas: Calidez de las paredes de piedra
Una de las principales características asociadas al revestimiento de piedra es su calidez, que tiene que ver con la imperfección propia cualquier material natural.
Esta propiedad es una de las que más se valora a la hora de su uso como estrategia de diseño.
De la misma manera que una fachada de piedra transmite una sensación de rusticidad, las piedras naturales empleadas en sectores aislados de una vivienda ayudan a equilibrar la simplicidad extrema que caracteriza a la arquitectura de líneas despojadas.
El factor “Novedad” de las piedras decorativas
Hay que reconocer que en cada uno de nosotros, existe una avidez importante en la demanda de elementos “nuevos”(vidriados, revoques plásticos, porcellanatos, laminados, iluminación).
Queremos tener “lo ultimo” que se está usando.
Aunque el uso de piedras naturales no es nuevo y tiene un historial muy amplio, hay que reconocer que durante décadas ciertas regiones permanecieron totalmente ajenas al fenómeno del revestimiento de piedra.
Al irse achicando sus costos y ante la mayor disponibilidad en las distintas variedades que fueron surgiendo, se generó una opción interesante para ese mercado que busca materiales alternativos.
Y en este sentido las piedras naturales tienen la facultad de sorprendernos cada día con variedades novedosas en tamaños, texturas y presentaciones.
Cómo limpiar paredes de piedra
No es casualidad que al hablar de mantenimiento haya mencionado al revestimiento de piedras exterior.
Convengamos que una pared de piedra interior, está lejos de la agresión de los agentes climáticos y la exposición a la intemperie; por eso en estos casos, los muros de piedra interiores tienen un MANTENIMIENTO NULO.
En el revestimiento de piedra exterior la realidad suele ser LEVEMENTE distinta.
Las piedras naturales son prácticamente impermeables, y por tanto muy poco propensas al deterioro propio de cualquier otro tipo de muro al exterior.
Las paredes de piedra rústica al exterior son muy propensas a “juntar telarañas”, lo que se entiende por lo “hospitalarias” que pueden ser las irregularidades propias de este tipo de piedras, a la hora de juntar insectos.
Convengamos también que sólo con un repaso de hidrolavadora, o con cepillo y manguera, al menos una vez al año, será suficiente para mantener el revestimiento de piedra exterior como el primer día.
Por razones económicas o por falta de tiempo (cada uno vive en su propio mundo), cada vez más gente quiere materiales de poco mantenimiento.
Desde este punto de vista las piedras para revestimiento, encuentran una de sus ventajas más fuertes, ya que su solidez y rusticidad prácticamente nos eximen de cualquier cuidado mayor para prolongar su vida útil.
Dónde se puede usar la piedra para revestimiento
Las piedras naturales, usadas de forma equilibrada y sin abusos que puedan aparecer como cansadores, permiten caracterizar cualquier lugar de la vivienda.
Una fachada de piedra o cualquier otro sector exterior de la vivienda, es lo que estamos acostumbrados a ver como habitual.
Allí es donde las piedras naturales logran un efecto de impacto visual más que agradable y muy distinto al que podría lograrse con el resto de los materiales de terminación.
Pero la realidad es que al irse masificando su uso se fueron corriendo los límites a la hora de elegir dónde usarlas.
La creatividad les ha dado lugar para aparecer en sectores en los que antes nadie hubiera imaginado colocarlas (muros decorativos para interiores).
Así, fuera de los lugares más comunes, como frentes, escaleras, o rincones de fuego (asadores y hogares), no es raro verlas colocadas en sitios menos frecuentes, como en baños, cocinas, patios interiores, barras o en paredes internas que quieran realzarse de una forma especial.
Rehabilitación de fachadas
La rehabilitación de fachadas se ha convertido en un requisito necesario para adaptar las viviendas antiguas a la nueva normativa de eficiencia energética.
En este sentido, la piedra natural es una solución constructiva muy interesante.
Por un lado, es un material resistente, duradero y sostenible.
Por otro, ofrece múltiples posibilidades a la hora de instalar en fachada.
A continuación, repasamos los diferentes tipos de fachadas que existen y las recomendaciones que se deben seguir a la hora de colocar piedra natural en proyectos de rehabilitación.
Tipos de fachadas y requisitos clave
Aplacados sin anclaje
Los aplacados de piedra natural que se instalen en fachada sin anclaje deberán ir sin cámara de aire y pegados con mortero o adhesivo.
Este tipo de colocación se puede realizar tanto en interior como en exterior.
En todo caso, se recomienda su instalación a un máximo de 2 metros ó bien 1 altura en rehabilitación de fachadas.
Las dimensiones de la baldosa de piedra natural deben ser de 0,24 m² como máximo o bien 40 kg por placa.
Aplacados con anclaje puntual
Los aplacados de piedra natural con anclaje también se instalan sin cámara de aire en la rehabilitación de fachadas pero, en este caso, se sujetan al muro con mortero o adhesivo y con anclajes de retención.
Las dimensiones de la baldosa de piedra natural deben ser de 0,24 m² como máximo o bien 40 kg por placa.
Se recomienda su instalación a un máximo de 5 alturas o lo que indiquen las ordenanzas públicas del lugar.
El material de los anclajes debe ser acero inoxidable. Se debe elegir mortero de cemento o mortero cola en función del tipo de piedra y el soporte.
El mortero debe cubrir toda la superficie de la baldosa que se vaya a instalar. En el caso de placas grandes, se debe utilizar doble encolado, es decir, mortero en la pieza y en el muro o fachada.
Como recomendación general para los aplacados de fachada, se debe controlar la humedad del soporte.
Además, el rejuntado se debe hacer, como mínimo, 24 horas después de endurecer el adhesivo.
Y, por supuesto, hay que respetar siempre las indicaciones del fabricante.
Fachadas ventiladas
En el caso de las fachadas ventiladas, se recomienda utilizar perfilería regulable, evitando los anclajes puntuales, siempre que sea posible.
La cámara de aire debe tener al menos 3 cm de ancho para asegurar el secado de la piedra natural.
Además, las juntas entre piezas deben tener al menos 2 mm. Y los zócalos se deben macizar para que queden bien unidos al muro o fachada en el que se instalen y evitar las roturas por impacto.
Estas recomendaciones están basadas en la norma UNE 22203 de colocación de fachadas de piedra natural.
Establece los procedimientos para la construcción de revestimientos de fachada, tanto en interiores como en exteriores, así como los elementos de diseño y del control en obra, tanto de los materiales como de la ejecución.